El peeling es una forma suave y eficaz de acelerar la exfoliación natural de la piel para revitalizarla.
Consiste en eliminar una o varias capas de la piel de forma controlada a la vez que se estimula la formación de piel nueva con menos manchas y arrugas.
Además mejora el tono y la textura de la piel, dándole una apariencia más fresca.
Existen diversos tipos de peeling en función de si su actuación sobre la piel es superficial, media o profunda.
En este tratamiento, utilizaremos dos sustancias para llevarlo a cabo: Fenol y TCA.
El fenol es un compuesto químico que se aplica en la piel haciendo que se produzca un alisamiento de las arrugas y una mejora del tono y textura de nuestra piel.
Es un tratamiento recomendado para pacientes a partir de los 30-35 años de edad, que no necesariamente tienen que tener algún problema cutáneo, y que deseen que la piel luzca más sana, luminosa y protegida ante agresiones externas.
Es importante mencionar, que se puede realizar este procedimiento tanto en la cara, como el cuello, escote y manos.
El TCA es un ácido un poco más agresivo que el fenol pero también más efectivo.
Se utiliza para tratar manchas, arrugas, cicatrices, acné, estrías.
Es un tratamiento que hace que la piel luzca más joven y con menos imperfecciones.
Es una alternativa altamente eficaz, segura, e ideal para aquellas pacientes que no deseen someterse a cirugía y con resultados muy similares o incluso superiores al tratamiento quirúrgico tipo lifting facial.
Una vez finalizado el tratamiento la piel estará preparada para broncearse y añadir luminosidad y color a nuestro rostro con los rayos del sol, pero sin olvidar nunca nuestro protector solar.
Beneficios
- NAlisamiento de las arrugas
- NMejora el tono y la textura de la piel
- NAlternativa a la cirugía
- NMayor luminosidad en la piel
¿Para quién?
Personas que buscan alisar las arrugas aunque también puede usarse para manchas, cicatrices, acné y estrías. Alternativa eficaz y segura a la cirugía.
¿Te interesa? Reserva cita y hazte el diagnóstico.
Te explicamos y recomendamos el mejor tratamiento para ti.
El diagnóstico facial es fundamental para conocer tus necesidades de belleza facial y así diseñar juntas el tratamiento en cabina o de cuidado cosmético.
¿Por qué hacerte un buen diagnóstico de la piel?
Porque necesito saber tu objetivo, tu tipo de piel, tu estilo de vida y tus necesidades .
Para poder diseñar un tratamiento lo más personalizado posible.
¿En qué consiste el diagnóstico?
Es un análisis profesional o examen de la piel, realizado a partir de tecnología y aparatología de última generación, con el que exploramos la dermis y la epidermis, desde la superficie hasta las capas más profundas.
También gracias al examen visual y táctil podemos definir mejor el objetivo.
¿Qué aspectos de la piel analizamos con un analizador facial?
- Hidratación: observamos el grado de hidratación de la epidermis.
- Manchas y discromías: Medimos el nivel de melanina para conocer la pigmentación desde el interior.
- Poros: analizamos el estado de los poros durante el diagnóstico de piel.
- Arrugas: evaluamos el grado de envejecimiento y nivel de profundidad de las arrugas.
- Nivel de grasa o sebo: determinamos la cantidad de grasa superficial de la piel, basándonos en el tamaño de las glándulas sebáceas y el nivel de adiposidad de cada una.
- Impurezas: realizamos un escaneo en distintas áreas de la piel del rostro para detectar impurezas, tanto las internas que aún no son visibles, como las que ya se han manifestado.